En nuestro segundo año de vida como revista médica independiente, nos es grato enviarles un saludo a la comunidad médica y al público en general, y que este año 2010, sea un año de arduo trabajo y prosperidad.
Es admirable la capacidad natural del cuerpo humano a regenerarse; esta publicación es un tributo al cuerpo humano, y a su inigualable capacidad evolutiva. A continuación quiero compartir con ustedes el ORIATIO DE HIMINIS DIGNITATE, cuya esencia explica cabalmente la filosofía de nuestro cuerpo editorial, espero que lo disfruten.
ORIATIO DE HIMINIS DIGNITATE.
“No te di, Adán, ni un puesto determinado ni un aspecto propio ni función alguna que te fuera peculiar, con el fin de que aquel puesto, aquel aspecto, aquella función por los que te decidieras, los obtengas y conserves según tu deseo y designio. La naturaleza limitada de los otros, se halla determinada por las leyes que yo he dictado. La tuya, tú mismo la determinaras sin estar limitado por barrera alguna, por tu propia voluntad, en cuyas manos te he confiado. Te puse en el centro del mundo con el fin de que pudieras observar, desde allí todo lo que existe en él. No te hice ni celestial ni terrenal, ni mortal ni inmortal con el fin de que -casi libre y soberano artífice de ti mismo- te plasmaras y te esculpieras en la forma que hubieras elegido. Podrás -de acuerdo con la decisión de tu voluntad- regenerarte así las cosas superiores que son divinas.”
Dr. Luis Rodríguez Pérez.
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